Cien niños de la Institución Educativa San Luis, ubicada en la vereda Cuba, se beneficiarán con la puesta en marcha de una planta de tratamiento de agua para la elaboración de los alimentos que se sirven en el restaurante escolar. El proyecto es desarrollado por aprendices SENA de la Articulación con la Media que estudian en este colegio.
Y es que la pequeña localidad no cuenta con acueducto propio y recibe el líquido sin tratar a través de un tubo que proviene del vecino municipio de Anserma.
La primera promoción del programa diseñó una planta piloto para solucionar esta dificultad en el restaurante, donde actualmente se debe hervir el agua para preparar los alimentos.
“En 2010 se hizo un análisis de las problemáticas ambientales de la vereda y se determinó que la más relevante era la no potabilización del agua, que causaba múltiples enfermedades de carácter intestinal, tanto en niños como en adultos”, comentó Ximena Ruiz Ramírez, docente de la institución y líder del proceso.
Para la ejecución de este proyecto, el colegio se apoyó en el programa de Articulación con la Media del SENA, a través del cual desde 2011 la Entidad forma aprendices como técnicos en Implementación de Sistemas de Potabilización de Agua para Pequeñas Comunidades, certificados por el Centro para la Formación Cafetera de la Regional Caldas.
La primera promoción del programa diseñó una planta piloto para solucionar esta dificultad en el restaurante, donde actualmente se debe hervir el agua para preparar los alimentos.
Lina Constanza Cardona Idárraga, instructora del área ambiental del SENA, explicó que “empezamos con el estudio del proyecto y luego se buscaron recursos económicos para la ejecución. También se inquirió el apoyo técnico técnico de la Entidad; éste lo hicimos a través de arquitectos para la parte funcional de la planta”.
La estructura que se empezó a construir en diciembre de 2012 consta de un tanque para el filtrado de partículas de barro, que recibe el agua sin tratar; otro para desinfección, y un tercero de almacenamiento del agua que se conecta a la tubería que va hasta el restaurante escolar.
“El proyecto ha causado un gran impacto en los aprendices porque, de una parte, se benefician directamente en el colegio y, además, pueden generar iniciativas similares en otras instituciones”, afirmó José Israel Rodríguez Solinas, rector de la Institución Educativa San Luis.
La visión de los aprendices, docentes y directivos es más ambiciosa; a mediano plazo la finalidad es replicar el modelo y el sistema de la planta en cada una de las casas de la vereda Cuba.