Agrinsa, empresa caldense dedicada a la producción y comercialización de huevos, es la primera compañía avícola que en el país certifica en el SENA las competencias laborales de 22 de sus trabajadores en bioseguridad.
Esta norma de competencia laboral comprende todas aquellas acciones que pretenden evitar la entrada y/o salida de enfermedades que afecten la sanidad de las granjas avícolas, como el control de visitantes, aseo de las instalaciones, procesos de desinfección y adecuada disposición de los excrementos, etc., medidas de bioseguridad exigidas por el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA).
“Revisamos los procesos de certificación en competencias laborales en avicultura y vimos que había algunos procesos que podíamos aplicar porque la bioseguridad la teníamos como un modo de vida, mientras en el resto de zonas del país es un proceso que apenas se está realizando”, anotó Rodolfo Villegas Jaramillo, director técnico de Agrinsa.
Entre 2003 y 2013, el consumo de huevo en el país –al año por persona– pasó de 179 a 236 unidades, según cifras de la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi).
“Nuestros empleados han ido adquiriendo esos conocimientos con base en unas recomendaciones técnicas y unas capacitaciones que ha hecho la empresa, pero era bueno que se pulieran y los certificara el SENA, lo que los hace más competitivos en el medio y anima a que los demás trabajadores también se cualifiquen”, señaló Villegas Jaramillo.
Con la implementación de estas medidas y el acompañamiento del SENA Agrinsa ha logrado llegar a producir mensualmente 5,5 millones de huevos que se comercializan en Caldas, Quindío, Risaralda, Tolima y Antioquia.
“El mercado es todos los días más exigente en la productividad de nuestros animales y para que eso se dé necesitamos una muy buena nutrición y una bioseguridad en las granjas, de tal manera que se pueda expresar la mejor genética en la producción de huevo, para un óptimo consumo y calidad”, expresó el director técnico de Agrinsa.
Por la implementación de estas prácticas que se ven materializadas en la calidad del producto que ofrecen a los consumidores, los lotes de producción de más de 30 mil aves fueron certificados como los mejores del país por las casas genéticas Avicol y Pronavicol.
“Es un orgullo y satisfacción que el SENA nos reconozca las labores que cumplimos en la avícola. Ahora me siento con mayor seguridad para realizar las actividades como la recepción de las pollas, los despiques y vacunas y tratar de sacar un lote de calidad para la buena producción de la empresa”, manifestó Jhonathan Andrés Ortiz, empleado de Agrinsa.
Entre 2003 y 2013, el consumo de huevo en el país –al año por persona– pasó de 179 a 236 unidades, según cifras de la Federación Nacional de Avicultores de Colombia (Fenavi).