Más de 300 aprendices del programa de Jóvenes Rurales Emprendedores de este municipio se han beneficiado con la instrucción que se imparte en los ambientes de formación, que Cesar David Patiño Chaparro un aprendiz del SENA, ha acondicionado para ayudar a sus vecinos.
La producción ovino-caprina se reactivó en la región con el ejemplo de este emprendedor que contribuyó a cambiar las costumbres de la zona; antes los criadores dejaban que las cabras pastaran libres alrededor del Cañón del Chicamocha, pero cuando Cesar decidió formarse en el SENA, la visión de sus vecinos cambio.
"Aprendí cómo se construía un aprisco y entendí que el negocio era por otro lado. Desde los cinco años conocía de las cabras pero ni siquiera sabía que existían razas. Monté mi aprisco y todos los vecinos me decían que gastaba la plata en tecnología cuando esto no era necesario", señala Cesar.
Este aprendiz empresario comenzó con diez cabras en un solo aprisco y en solo dos años ha construido tres, además cuenta con 300 animales. Actualmente comercializa un cabro diario y sus ventas superan los $6 millones mensuales; su meta es construir dos apriscos más para comercializar 10 animales al día.
"Utilizar los apriscos del aprendiz como ambientes de formación es clave por el liderazgo que este joven ejerce en la región": Germán Garcés, subdirector del Centro Agroempresarial.
"Compré mi primer padrón de la raza Boer que me costó $1,2 millones y casi me echan de la vereda porque me decían que estaba malgastando la plata, ahora que ven la empresa productiva, todos quieren aprender de mí y de mi aprisco", relata Patiño Chaparro.
Para Germán Alfonso Garcés Mariño, subdirector del Centro Agroempresarial y turístico de los Andes del SENA en Málaga, la idea de utilizar los apriscos del aprendiz como ambientes de formación es una gran experiencia por el liderazgo que este joven ejerce en la región.
"La unidad productiva de César David nos permite reunir a caprinocultores de otras regiones cercanas a Covarachía. En julio reunimos más de 120 aprendices, líderes y productores caprinos de los municipios de Boavita, La Uvita, Capitanejo, Covarachía, Málaga y Molagavita", indicó Mariño.
Según la Asociación de Criadores de Ganado Ovino de Colombia (Asoovinos), en el período 1980 a 2002 se triplicó el suministro total de carne, de 47 millones de toneladas se pasó a 139. Actualmente la situación ha sido más dinámica en los países que han mostrado un rápido crecimiento económico principalmente en Asia oriental, con China a la cabeza, que representa el 57% del aumento del suministro total de carne de cordero en los países en desarrollo.
"Estoy muy agradecido con el SENA por toda la capacitación porque así nos proyectamos mejor en la caprinocultura. En esta zona nadie tenía esperanzas en la cría de los cabros pero ahora todo cambió", expresó Duarte Chaparro.
Un estudio adelantado por la Universidad Industrial de Santander, Corporación Colombiana Agropecuaria (Corpoica) y el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA) el inventario caprino de Santander esa de 250 mil cabras y 30 mil carneros, que producen alrededor de 300 litros diarios de leche y 4 mil toneladas de carne que se consume con el consumo mayor en Bogotá.