Colombia cuenta con tierras fértiles para el aprovechamiento del mercado mundial del cultivo de caucho en los departamentos de Vichada, Santander, Antioquia y Caquetá.
A pesar de que la siembra ha aumentado a 47.656 hectáreas cultivadas, el país aún importa, cada año, de Indonesia, Malasia y Guatemala, cerca de 30 mil toneladas. Esta cantidad representa el 97 por ciento del producto natural utilizado para la fabricación de neumáticos, impermeables, aislantes, prendas de vestir, cintas adhesivas, mantas y zapatos, entre otros.
Este sector productivo nacional ha contado con el apoyo y acompañamiento del SENA a través de su mesa sectorial. De la mano de la Confederación Cauchera Colombiana (CCC), la Compañía Cauchera Colombiana y asociaciones locales de productores se han desarrollado procesos de formación, certificación y asesoría para los caucheros colombianos.
Para los próximos años se proyecta que se debe vincular laboralmente, para aprovechar las 27 mil hectáreas aptas para producción, a cerca de 3.500 rayadores de caucho.
Estas entidades se comprometieron a brindarles formación, asistencia técnica y a certificar las competencias laborales requeridas para garantizar que la población productora de caucho cuente con el personal capacitado y pueda crecer.
Para los próximos años, se proyecta que se debe vincular laboralmente, para aprovechar las 27 mil hectáreas aptas para producción, a cerca de 3.500 rayadores de caucho.
EL CAUCHO Y SU PROYECCIÓN
Para el primer semestre de 2016, el SENA y la CCC consolidarán la Escuela Nacional de Rayadores de Caucho. Se trata de una iniciativa que, sumada a nuevas estrategias de comercialización, certificación de competencias laborales y adopción de nuevas tecnologías, busca fortalecer este gremio de la producción agrícola del país.
Hoy, con las hectáreas cultivadas, a las cuales se dedican cerca de 5.800 productores colombianos, el futuro de la producción de caucho en el país es promisorio. Sin embargo, la baja en los precios en el mercado y la falta de personal capacitado evidencia un lento desarrollo y falta de aprovechamiento de este recurso natural.
Para el 2014, cerca de 10.477 hectáreas debían haber sido aprovechadas en los 17 departamentos del país donde se cultiva caucho. Sin embargo, solo existen 3.157 en etapa de producción.
"Trabajamos con el SENA y desarrollamos un proceso de formación y evaluación que permite contar con la metodología para formar técnicos capacitados para el proceso de rayado. Además, pondremos en marcha el Plan Nacional de Certificación de Competencias", explicó Juan Carlos Silva, presidente de la CCC y vicepresidente de la Mesa Sectorial de Caucho.
El Plan Nacional de Certificación se realizará con los centros aliados a la Mesa Sectorial en Meta, Santander, Antioquia, Córdoba y Caquetá. Con respecto a la adopción de nuevas tecnologías, se están definiendo. Algunas son: cultivos limpios, estimulación de plantaciones y sangrías no consecutivas.
La Secretaria Técnica de la Mesa Sectorial, la CCC y la Asociación de Reforestadores y Cultivadores de Caucho del Caquetá (Asoheca) han realizado diversos procesos de formación y asistencia técnica en rayado, sangría y vivero.
Además, organizaron el Primer Foro Regional Cauchero en el que se discutieron y analizaron los aportes institucionales y perspectivas frente a la cadena productiva del sector cauchero tanto a nivel regional como nacional, para proyectar su desarrollo.
En el foro se conoció que, en los próximos tres años, deben entrar en fase de producción 23.751 hectáreas más, cifras realmente significativas para el gremio que afronta una realidad compleja, por cuanto la siembra va en aumento pero el aprovechamiento del cultivo vive un estancamiento paulatino.
Según un estudio de la CCC, los productores que tienen área apta para empezar el aprovechamiento y no lo están haciendo, el 43 por ciento, lo justifica asegurando falta de mano de obra calificada; el 35 por ciento, no tiene un porcentaje significativo de árboles para que la entrada a producción sea rentable. Por eso espera a que haya un porcentaje de árboles para explotar; el 15 por ciento asegura que es por falta de financiamiento y el 7 por ciento, no le interesa explotar.
El trabajo articulado, desde la Mesa Sectorial, permitió que la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos (USAID) apoyará con 800 millones de pesos para la creación de la Comercializadora Internacional de Caucho, compañía que tiene como principales gestores a la Compañía Cauchera, ubicada en Puerto Araujo, Santander y Asoheca. Como contrapartida, las dos empresas aportan 2.260 millones de pesos y buscan estar en el mercado internacional con un producto estándar.
"Al principio, las exportaciones serán pequeñas y, de acuerdo con las proyecciones a cinco años, estarán en producción 50 mil hectáreas que proporcionarán unas 100 mil toneladas, de las cuales el 30 por ciento serán para el abastecimiento del mercado interno", dijo Hernán Hernández Peñaloza, gerente de la CCC y presidente de la Mesa Sectorial de Caucho.
SENA ALIADO DE LOS PRODUCTORES
"Desde la Entidad, como Secretaria Técnica de la Mesa Sectorial, se desarrollan estrategias de concertación que conducen a promover acciones formativas para la cualificación del recurso humano y así contar con el personal capacitado, que se dedique al rayado y aprovechamiento del cultivo", destacó José Delby Vargas, director del SENA en Caquetá.
Desde el año anterior, con formación orientada por expertos guatemaltecos y a través del Centro Tecnológico de la Amazonía, la Entidad fortalece la metodología de formación de formadores en donde han participado instructores y productores de Antioquia, Santander, Guaviare, Córdoba, Meta, Putumayo, Tolima, Cundinamarca, Guainía, Norte de Santander y Caquetá. Estas personas tienen un papel fundamental, replicar los conocimientos adquiridos en sus regiones.
Para el próximo año, además de consolidar la Escuela Nacional de Rayadores, será establecida una alianza estratégica entre los representantes de las dos plantas procesadoras de caucho.}
"Requerimos de mano de obra calificada que llegue a los predios para aplicar técnicas adecuadas y así mejorar la productividad. Debemos disminuir las frecuencias del rayado, actividad que debe hacerse en la madrugada, y además recortar a 20 centímetros por metro el consumo de corteza del árbol. Con esto la naturaleza tendrá un menor impacto", aseguró Pablo Emilio Pineda, director de Asoheca, quien representa a cerca de 1.000 productores de Caquetá.
Las técnicas sugeridas por el ingeniero Pineda son aplicadas en Guatemala y con gran éxito produce cerca de 80 mil toneladas al año. Su modelo de trabajo es replicado en Malasia, nación asiática que junto a Tailandia e indonesia, producen el 70 por ciento del caucho que se suministra a la industria mundial.
Para el 2016, además de consolidar la Escuela Nacional de Rayadores, será establecida una alianza estratégica entre los representantes de las dos plantas procesadoras de caucho, de Puerto Araújo y Asoheca, ubicadas en Santander y Caquetá; el objetivo: estandarizar la comercialización del producto.