Edrian Gaviria es un cartagenero de 20 años que gracias a la formación que adelanta en el programa de Soldadura Naval, en el Centro Internacional Náutico, Fluvial y Portuario del SENA en Bolívar, trabaja en contrajornada a su proceso formativo en uno de los principales astilleros del 'Corralito de piedra'.
Gaviria es una de las más de 100 personas que se benefician con la llegada de los equipos de alta tecnología que permiten desarrollar procesos de soldadura naval semiautomáticos en diferentes materiales como el acero, aluminio, entre otros.
"Con esta máquina podemos fortalecer las habilidades técnicas de nuestros aprendices y ellos a su vez ofrecer al sector industrial aplicaciones de mejor calidad, altos rangos y su mano de obra competente y actualizada a las necesidades del mercado", explicó Álex Álvarez, instructor.
Esto será posible gracias a la inversión realizada por la entidad más querida por los colombianos por más de 200 millones de pesos, que permitieron la adquisición de diez equipos multiprocesos con los que se facilita el mantenimiento, reparación, construcción, fabricación metálica y entrenamientos, así mismo se consiguieron máquinas de corte, alimentadores, kits de seguridad, entre otros elementos, todos importantes para operar en ambientes adversos y mejorar los procedimientos.
"Somos afortunados de contar con estos equipos especializados y de alta tecnología, pues nos permiten prepararnos mejor y aprender técnicas de mayor calidad", resaltó Edrian Gaviria, quien gracias a su entrenamiento con estos equipos pasó de ser asistente a supervisor en soldadura en la empresa en la que labora actualmente.
La industria astillera en Colombia está enfocada en la modernización de las flotas mercantes y de defensa, lo anterior sumado a la excepcional ubicación geográfica del país hace del sector una fuerza en desarrollo.
Según datos del programa Marca País, el mercado de reparación de buques en Colombia oscila entre 15 y 30 millones de dólares; su aporte al empleo aumentó en promedio, el año anterior, 10 por ciento, por lo que este sector altamente productivo perfila a Colombia como una potencia en materia de mantenimiento y reparación de artefactos navales.
Por ello, uno de los grandes retos que enfrenta el sector para fomentar la competitividad es la cualificación del talento humano de acuerdo a las normas internacionales vigentes, para el SENA la meta es formar a la medida de esas necesidades implementando el uso de equipos tecnológicos en los programas de formación del sector naval y así fortalecer las capacidades de los aprendices.