Con obras de adecuación, mantenimiento, construcción, modernización de ambientes y distintos espacios físicos del Centro Acuícola y Agroindustrial de Gaira, la Entidad fortalece los procesos de formación, innovación y desarrollo tecnológico para entregar talento humano calificado, con pertinencia y calidad, según las necesidades del sector productivo de la región.
El director general del SENA, Alfonso Prada, precisó que estas renovaciones físicas hacen parte de la construcción de una sociedad más equitativa, educada y en paz.
"Con mucho orgullo registramos la evolución de este centro; era un sueño que hace dos años nos propusimos y hoy ya demostramos que es posible hacer una gestión eficiente y transparente para mejorar la vida de los aprendices. De esta forma transformamos el país y ampliamos las oportunidades de inserción laboral de los jóvenes", aseguró Prada durante un recorrido al espacio.
La inversión, cercana a los 1.800 millones de pesos, permitió la renovación de 12 ambientes de formación y talleres de las áreas de agroindustria, bilingüismo, acuicultura, diseño gráfico, mecánica y soldadura, entre otros.
De igual forma se intervino la zona de dormitorios, auditoria y se robusteció el sistema de alcantarillado, vertimiento de aguas y electricidad, entre otros.
Cuatro mil aprendices que se forman en la sede se beneficiarán al año con estas obras, entre ellos 200 que residen en el centro, pues este funciona también como internado para jóvenes cuyos hogares quedan en municipios o corregimientos apartados de los cascos urbanos del departamento.
Para Rosa Patricia Olaya, oriunda de Ariguaní (Magdalena) y aprendiz de la carrera tecnológica en Obras Civiles, la Institución ha sido para ella una oportunidad de desarrollar su proyecto de vida y gracias al fortalecimiento de su infraestructura tecnológica, junto a sus compañeros podrá ser más competitiva.
"Vivo a tres horas y media de Santa Marta; la única forma de poder salir adelante era estudiando, si no, aún seguiría ayudando a mi mamá a lavar ropa ajena para poder tener un sustento", señaló Rosa, quien es líder de convivencia de aprendices, rol a través del que promueve la armonía, tolerancia y buenas relaciones.
En total, incluyendo formación complementaria, este centro de formación impacta a más de 53.000 aprendices, cada año, en áreas como la pecuaria, acuícola, agrícola, mecánica, biotecnológica agroindustrial y ambiental.
Durante el recorrido del Director General a la Regional, se reunió con más de 150 instructores en etapa de alistamiento de la formación para el tercer trimestre del año, a quienes les socializó el papel del SENA en el posconflicto y la importancia de su rol como formadores para la transformación del país.
"Ustedes serán eje fundamental en el posconflicto; sus enseñanzas, conocimiento y experiencias transformarán las vidas de víctimas y excombatientes", dijo el Director General.
DEPORTE, UN HOME RUN A LA FORMACIÓN INTEGRAL SENA
María Angélica Castillo es madre soltera, tiene tres hijos y hace unos años 'bateó' la violencia de su hogar; ella fue durante muchos tiempo, víctima de violencia física y psicológica por parte de su expareja.
Hoy, esta oriunda del municipio de Turbaco (Bolívar), 'corre las bases' de su vida con el apoyo del SENA. Su primera 'carrera ganada' fue abrirse campo y destacarse en un área considerada para hombres: la soldadura.
"Mi sueño siempre fue ingresar al SENA; hoy pienso que esta institución es la mejor opción para quienes desean emprender o recomenzar su vida y acceder más rápido a un empleo, pero sobre todo para fortalecer el ser, ya que aquí siempre están pensando en nuestro bienestar", contó María Angélica, aprendiz del programa Técnico en Soldadura de Platina, del Centro para la Industria Petroquímica, de la Regional Bolívar.
Ella hace parte del grupo de 207 aprendices deportistas y 28 instructores de siete regionales del país que participan del Torneo Nacional de Sóftbol SENA, justa deportiva que se desarrolla en Santa Marta hasta mañana (9 de julio).
Lisandro Canchila fue otro de los competidores, quien junto a su hijo, también aprendiz de la Entidad, representó a la Regional Sucre en el encuentro en el que además participan jóvenes de departamentos como Atlántico, Bolívar, Cesar, Córdoba, Norte de Santander, Sucre y Magdalena.
"Me siento contento; uno ve el apoyo que aquí le brindan no solo a los jóvenes sino también a las personas mayores; se ve cómo nos incluyen a todos por igual y además cómo inculcan, a través del deporte, valores tan importantes como el respeto, la tolerancia y el trabajo en equipo", expresó el aprendiz del programa Tecnólogo en Gestión Logística y víctima del conflicto armado hace 26 años, tiempo desde el cual también practica el sóftbol.
La iniciativa hace parte de la integralidad de la formación de la Entidad, que busca el fortalecimiento de habilidades blandas, deportivas, culturales, competencias socioemocionales y para la vida, que favorezcan el crecimiento personal y el desempeño laboral de los jóvenes.