En el Día Internacional de la Mujer, Guadalajara de Buga ‘la Ciudad Señora de Colombia’, recibió un estupendo regalo por parte del SENA y el Gobierno nacional. Se trata de tres nuevos espacios de aprendizaje que elevarán sustancialmente el nivel de la formación de los aprendices y mejorarán la competitividad de las empresas donde ellos vayan a trabajar.
Esta buena noticia, que beneficiará anualmente a 7.000 aprendices y trabajadores de diferentes empresas de la región, fue posible gracias a una inversión de 4.300 millones de pesos, que se tradujo en una moderna Pista de Entrenamiento para Espacios Confinados, un Laboratorio de Investigaciones Agroindustriales y la tercera fase de la Escuela Nacional de Confitería y Dulcería, única en Latinoamérica.
El director general del SENA, Alfonso Prada, encabezó la ceremonia de entrega de las nuevas obras, implementadas en el Centro Agropecuario de Buga (CAB), ubicado en el centro del Valle del Cauca.
Con una inversión de 4.300 millones de pesos, estas obras beneficiarán cada año a 7.000 aprendices y trabajadores de diferentes empresas de la región.
“Nuestros egresados serán cada vez más apetecidos por los empresarios en la medida en que se formen con tecnologías modernas y con la pertinencia que requiere el sector productivo del país, y en este caso particular el de Buga y sus alrededores”, dijo Prada.
En la inauguración de las obras también se contó con la presencia del alcalde de Buga, Julián Andrés Latorre; el director de la Regional Valle del SENA, César Alveiro Trujillo Solarte; y el subdirector del CAB, Alexander Atehortúa González.
Para el burgomaestre de los bugueños estas inversiones del SENA “apuestan por una mejor competitividad de Buga y la Región, pues están en sintonía con el arribo de una nueva empresa de cuartos fríos y una cementera; además de impactar a las firmas avícolas y de procesamiento de alimentos ya existentes”.
Laboratorio al servicio de las empresas de la región
Por su parte, el empresario Mario Cristóbal Ariza Arbeláez, de la Productora y Comercializadora de Alimentos Trópico se mostró complacido por los servicios que ofrecerá el moderno Laboratorio de Investigaciones Industriales cuya apertura oficial se produjo este miércoles. “Nos permitirá realizar aquí mismo, con elevada calidad los análisis químicos, físicos y microbiológicos que hoy debemos buscar en Antioquia o en Cali”, puntualizó.
El laboratorio, en el que se invirtieron 3.500 millones de pesos y que estará al servicio de las empresas de la Región, es un ambiente de formación integrado por el laboratorio para muestras físicoquímicas, microbiológicas y reactivos de materiales, en el cual se desarrollarán procesos de investigación aplicada por parte de aprendices e instructores.
La Pista de Espacios Confinados, en la que se invirtieron 600 millones de pesos, permitirá el entrenamiento de aprendices y trabajadores que laboren en sitios como ductos y tuberías de grandes diámetros, caja de válvulas y contrapozos, pozos sépticos, cajas subterráneas (redes eléctricas), separadores, calderas y tanques para químicos.
Por último, la tercera etapa de la Escuela Nacional de Confitería y Dulcería, que costó 200 millones de pesos, permitirá fortalecer la formación en aspectos como la elaboración de productos de confitería y chocolatería.
Desde 2013 cuando fue inaugurada, en esta Escuela se han invertido casi 2.500 millones de pesos para mejorar la formación de aprendices y personal de las empresas de un sector que se ubica principalmente en el Valle del Cauca, y cuyas exportaciones superan los 280 millones de dólares al año.
Con formación de calidad e inversión estratégica en modernas tecnologías, el SENA sigue impactando la competitividad de las empresas del país y la empleabilidad de las regiones de Colombia.