En este espacio participaron representantes de la comunidad de Puerto Esperanza y Leticia, la ONG ChagraSelva y varias entidades gubernamentales como la Agencia Nacional de Tierras y la Secretaría de Competitividad, Medio Ambiente y Turismo.
“Esta incitativa tiene una gran importancia, ya que busca fortalecer la economía rural, mejorar las condiciones de vida y preservar el conocimiento ancestral de comunidades indígenas”, asegura Arturo Arango, subdirector del Centro para la Biodiversidad y el Turismo del Amazonas.
Desde el SENA se promueve el desarrollo integral, fomentando prácticas agrícolas sostenibles, garantizando la seguridad alimentaria y generando oportunidades económicas para la región.
La colaboración entre el Servicio Nacional de Aprendizaje y las diferentes entidades participantes es crucial para asegurar un impacto positivo y duradero en las comunidades indígenas.