Jóvenes provenientes de distintos sectores rurales de Nariño, que se forman como tecnólogos en Producción Agropecuaria, en su búsqueda de soluciones sostenibles para su sector, implementan procesos innovadores de forraje hidropónico, revolucionando la producción de biomasa para que sirva de suplemento alimenticio en la dieta de animales que consumen forraje fresco o forraje verde.

"El forraje hidropónico es una técnica que aprovecha los avances tecnológicos y los principios de la hidroponía para cultivar vegetales de forma eficiente y sostenible en un invernadero, sin necesidad de suelo. Este método permite controlar de manera precisa los nutrientes y el riego, brindando a las plantas un entorno óptimo para su crecimiento y desarrollo", expresó Rafael García, instructor del Centro Internacional de Producción Limpia Lope del SENA en Pasto.

El proceso es muy sencillo: se selecciona la variedad de la semilla que se va a sembrar, que por lo general son gramíneas de trigo, avena, maíz o cebada. Luego, en el invernadero, se establecen las variables de temperatura, humedad y aireación; se ubican las semillas seleccionadas en las bandejas que tienen unos orificios que permiten el desagüe del riego y se colocan en los estantes construidos por los aprendices con tubos y codos de PVC.

Posteriormente, ingresa a una fase de hidratación de 48 horas en donde las semillas se sumergen en agua y pasan a una fase de oscuridad cero, donde se hidratan de 8 a 10 veces al día.

"Generalmente nosotros lo usamos con el ganado para que les sirva como suplemento a su alimentación, ya que el proceso de crecimiento del forraje dura 15 días. Es decir que por cada día el forraje crece un centímetro y en nuestro cultivo a los 15 días se obtiene 15 kilos por metro cuadrado", expresó Catalina Ordoñez Cabrera, aprendiz del programa tecnólogo en Producción Agropecuaria.

La producción de forraje hidropónico se convierte en una solución innovadora y altamente efectiva para la alimentación de animales herbívoros que a menudo enfrentan limitaciones durante ciertas épocas del año, cuando la disponibilidad de pasto natural es escasa debido a factores climáticos o estacionales.