Con disciplina, dedicación y trabajo en equipo, 17 aprendices que se forman en el SENA como tecnólogos en Producción de Especies Menores, acompañados de instructores del área pecuaria, atendieron con gran destreza y habilidad el parto sincrónico de 26 lechones.
"En el SENA aprendemos haciendo, y bajo este esquema ponemos en práctica lo aprendido. Durante la fase de reproducción logramos inseminar de manera artificial 2 cerdas con una pequeña diferencia de tiempo y así obtener un parto sincrónico para mejorar la genética y los registros de la unidad productiva", explicó Daniela Molina, aprendiz en formación.
Para adelantar el proceso, los aprendices desarrollaron las labores de levante y ceba de las hembras adquiridas en la región.
La iniciativa que está acorde a los parámetros reproductivos de los sistemas de alimentación, planes sanitarios y de reproducción.
"Es una apuesta importante al lograr la sincronización fisiológica del ciclo estral de las 2 hembras, implementando técnicas de biotecnología reproductiva como la inseminación artificial y, con ello, atender el parto sincrónico y así dar vida a 26 lechones", destacó Eduar Casanova, médico veterinario e instructor líder del proceso.
La experiencia de los aprendices e instructores se desarrolla en la Granja Amazónica Caqueteña, donde funciona la unidad productiva porcina que luego de un año de funcionamiento ya cuenta con 32 animales en crecimiento, dado el compromiso y dedicación que quienes se encargan de su cuidado y manejo.
La unidad productiva de ceba de porcinos se estableció como parte de la estrategia de formación por proyectos, y en ella cada aprendiz realizó la adecuación, establecimiento, análisis y seguimiento de la unidad analizando parámetros productivos e impacto ambiental.
Al conocer de manera personal la unidad productiva, Danny López Segura, director del SENA en Caquetá, señaló: "Da gusto estar en contacto con los aprendices y ver el resultado de su trabajo y compromiso. Ellos cuentan con el acompañamiento permanente de los instructores, el equipo de formación y la dirección para consolidar su unidad productiva".
Con este tipo de iniciativas, el SENA pone de manifiesto su compromiso de formar a los aprendices en programas pertinentes para la región, que les permita trabajar en proyectos productivos que los conduzcan a la generación de ingresos y a mejorar la calidad de vida de la población.
El trabajo y dedicación del grupo de trabajo ha permitido el crecimiento de esta unidad productiva.