Laura, Andrés y Yesenia comparten el mismo sueño: hacer un aporte para disminuir la contaminación del planeta.

Para lograrlo, estos aprendices trabajan con ahínco en un proyecto de reciclaje químico de plásticos que ha comenzado a abrirse paso en el ámbito nacional e internacional, desde un pequeño laboratorio del Complejo Salomia, en Cali.   

"Obtener resultados positivos es muy importante, pues tratamos con una gran fuente de emisión de partículas contaminantes. El beneficio permitirá una mayor sostenibilidad ambiental", expresa Yesenia Asprilla Córdoba, de 38 años, al interpretar el sentir de los tres aprendices del Centro Nacional de Asistencia Técnica a la Industria (ASTIN) de la Regional Valle.

"Así hacemos un aporte a la sociedad y a la industria", complementa Laura Serrano Arroyo, de 18 años, quien agrega que "el reciclaje químico es una tendencia mundial que permite obtener resultados no antes vistos".

Con el proyecto, denominado "Reciclaje químico de residuos de PET por el método de Solvolisis", los tres aprendices, pertenecientes al Semillero de Investigación del ASTIN, se ganaron el derecho a representar al SENA y al país en la Feria Internacional de Ciencia y Tecnología CIENTEC 2023, que se realizará en Perú en noviembre de este año.

La buena noticia es el resultado de su destacada participación, en octubre de 2022, en el Encuentro Nacional de Semilleros de Investigación que se realizó en Medellín por la RedColsi, una fundación no gubernamental que promueve actividades científicas entre estudiantes de educación básica, media y superior de Colombia. 

Además de resaltar su compromiso con el ambiente, Andrés Lozano Vélez, joven caleño de 19 años, apunta hacia los beneficios personales que deja vivir una experiencia clave para su desarrollo formativo en el SENA. "De esta manera fortalezco mis habilidades como orador y para la investigación, algo a lo cual me pienso dedicar en adelante", dice Andrés.

El proyecto fue seleccionado para participar en la Feria Internacional de Ciencia y Tecnología, que se realizará en noviembre próximo en Perú.

La labor de estos aprendices, del Tecnólogo en Química Aplicada a la Industria, es guiada por el instructor del ASTIN Marcelo Guancha Chalapud, quien precisa que "el proyecto de reciclaje químico de plásticos se enmarca en la economía circular, un campo de actualidad en el mundo al cual nuestros aprendices tienen la oportunidad de acceder para aportar sus propias soluciones, desde la investigación aplicada que fomentamos en la Entidad".

"Hoy contamos con productos plásticos fáciles de reciclar, pero hay muchos que no pueden reutilizarse valiéndose del método convencional; entre estos tenemos los empaques de alimentos, envases y las películas multicapas, que van a parar a los rellenos sanitarios. Es por eso que en el SENA le apostamos al reciclaje químico, como una buena opción para el país", redondea el instructor.

Por su parte, al referirse a este proceso, el director Regional del SENA, Fernando José Muriel Andrade, destaca que con actividades de este tipo "la formación de nuestros aprendices alcanza altos estándares y la pertinencia necesaria para aportar soluciones concretas a problemas que vivimos en el país".

Y añade: "En la Región, actualmente existe una fuerte demanda de personas innovadoras y capaces de aportar a la sostenibilidad ambiental y al incremento de la productividad de industrias como la de alimentos, la farmacéutica o la caña de azúcar".  

De acuerdo con un informe del portal OpenMind (MenteAbierta, en Español) del Banco BBWA, publicado en marzo del 2021 (https://www.bbvaopenmind.com/ciencia/medioambiente/nuevas-soluciones-problema-de-los-plasticos/), de los millones de toneladas de plástico que se producen en el mundo cada año, solo el 9% son reciclados; mientras el 12% se incinera y el 79% va a parar a rellenos sanitarios o al mar, siendo un grave factor de la contaminación ambiental que padecemos.   

Los procesos de reciclaje químico del plástico por Solvolisis datan del 2010 y se practican especialmente en Europa. El proyecto de los aprendices del SENA busca realizarlo mediante sustancias que impacten en el menor grado posible el Ambiente, mientras rompen las cadenas de polímeros para obtener monómeros que permitan fabricar nuevos productos.