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Nació en el departamento de Vaupés, en la comunidad indígena Teresitas de Piramirí, del grupo étnico Desano; vivió su infancia junto con sus padres y ocho hermanos y su sueño siempre fue ser sacerdote o profesor ayudando a su comunidad.

Arsenio, pasó de aprendiz a instructor y viaja con el SENA por el Guaviare para brindar mejor calidad de vida a comunidades indígenas.

Inició su educación primaria en 1996, en la Escuela Rural de Teresita, donde todos sus profesores eran étnicos; allí llegó hasta 5° grado, el cual reprobó porque no le entendía nada a su profesora Blanca.

Arsenio no sabía hablar español; hasta entonces había recibido su educación en lenguaje piratapuyo. Él y sus compañeros repitieron el año, pero esta vez con la ayuda de un profesor indígena quien reforzaba lo que no entendían de la profesora colona.

Así fue como aprendió a hablar español.

"El bachillerato lo realicé en un colegio a cuatro horas, vía fluvial, de mi comunidad; allí la gran mayoría de compañeros eran indígenas tucano. Ellos se comunicaban en otra lengua y fue un poco difícil compartir", dice Arsenio, agregando que "poco a poco fui aprendiendo su dialecto".

Cuando termino el bachillerato, Arsenio no tenía la posibilidad de seguir estudiando; él, que se caracteriza por ser un hombre muy espiritual, amante de su cultura, solidario, que todos los domingos iba a misa, recuerda entre risas la vez que tuvo que tomar la difícil decisión de convertirse o no, en sacerdote. Su padre siempre quiso que uno de sus  hijos fuera cura y lo estaba motivando a asistir al seminario para iniciar su carrera espiritual.

Viajó a Bogotá, una ciudad desconocida a la que describe como "muy grande, con mucha contaminación y ruido". Fue la primera vez que visitó la capital, pero la estadía le fue un poco difícil; no le gustaba el clima y mucho menos estar abrigado.

En el seminario, donde durante un año aprendió de filosofía y vestía con sotana, supo que esa no era su vocación; extrañaba su comunidad y sus costumbres.

Durante un receso llegó al departamento del Guaviare a visitar a una hermana, quien trabajaba en una asociación indígena, y fue gracias a ella que ingreso al SENA.

"Allí hizo el Técnico en Salud Pública, el cual le llamo la atención por su enfoque diferencial; el objetivo era rescatar y conservar la salud tradicional indígena", cuenta Carmenza, su hermana.

A las palabras de la mujer, Arsenio añade que "me motivé porque además de aprender de salud iba a poder contribuir con el rescate de mi cultura".

Siempre se destacó en el proceso de formacióno y fue exaltado como el mejor aprendiz del grupo. Recibió su certificación y gracias a su dedicación y buenos méritos fue contratado como instructor de la Entidad.

"Arsenio llega hasta los rincones más apartados del departamento del Guaviare, viaja a zonas lejanas y de difícil acceso, para arribar a comunidades indígenas como los Jiw, Elitilla, Curripacos y Puhinave, sin importar los interminables días de viaje, ya sea por agua o por tierra", declaró el director regional del SENA en esta zona del país, Édgar Augusto Braga Silva.

El ahora instructor comparte con gusto sus conocimientos y le gusta viajar hasta una semana vía fluvial.

"Quiero recorrer toda la región llevando el logo del SENA. Trabajo por mis comunidades indígenas, para que algún día asciendan y al igual que yo sean mejores", puntualiza Arsenio.

INSCRIPCIONES ABIERTAS

El SENA tiene abierta –hasta el próximo lunes 15 de agosto– una nueva convocatoria para acceder a uno de más de 70.000 cupos para adelantar un programa de formación presencial titulada.

Los interesados pueden inscribirse en www.sena.edu.co, ubicando en la página de inicio –en la parte inferior izquierda– el recuadro gris que dice 'Qué le gustaría estudiar' y siguiendo las instrucciones.

Además, con el fin de ayudar a las personas que tienen dificultades de acceso a internet, funcionarios de la Institución están a lo largo y ancho del territorio nacional haciendo registros, casi que puerta a puerta, a través de la estrategia denominada 'Yo te inscribo'.

Los ciudadanos también pueden obtener información a través de las líneas telefónicas gratuitas: en Bogotá marcando el número 5925555 y en el resto del país llamando al 018000-910270.

Los aspirantes pueden elegir un programa académico como segunda opción; en este será admitido siempre y cuando haya disponibilidad de cupo, no haya sido seleccionado en su primera alternativa y tenga el puntaje mínimo requerido.