El consultor internacional Jamil Salmi, quien recientemente estuvo en Colombia, invitado a un evento académico del SENA, señala tres puntos esenciales para tener instituciones de educación superior de talla mundial: talento, recursos y gobernanza.
Este marroquí, quien ha trabajado con el Banco Mundial y otras organizaciones internacionales desarrollando temas de educación, compartió con SENA Noticias las conclusiones de sus investigaciones sobre las características de instituciones de educación exitosas.
Salmi también es autor de varios libros sobre los retos de la educación superior en el mundo y ha sido consultar en más de 60 países en Europa, Asia, África y Suramérica. Durante el Encuentro Internacional ‘SENA en la ruta a la excelencia al 2018’ presentó los resultados de sus más recientes estudios.
¿Cómo definir instituciones de talla mundial?
El punto principal para definir una institución excelente, de nivel mundial, es mirar los productos de estas instituciones. Y el principal producto son los egresados, si son reconocidos como bien cualificados, con una capacitación pertinente para poder trabajar en el mundo productivo.
“El SENA, siendo una organización gubernamental, siempre se encuentra el desafío, y tiene la flexibilidad suficiente y la independencia, para que no influyan factores políticos en su gestión”.
¿Además de los egresados qué otras características hay que tener en cuenta para que esa institución sea un referente internacional?
Hay que pensar qué permite a esta institución formar buenos egresados. Yo en mi trabajo he identificado tres factores principales que tienen que encontrarse al tiempo, juntos. El primero es el talento, la concentración del talento; el segundo son los recursos y el tercer punto es la gobernanza.
En cuanto al talento hay que pensar principalmente en las cualificaciones de los profesores, que tienen que ser muy buenos; en el caso del SENA tienen que tener, al mismo tiempo, un buen desarrollo pedagógico como profesor y un buen conocimiento del mundo laboral. En segundo lugar, los aprendices que llegan a la institución tienen que ser bien preparados académicamente, y quizás más importante, bien motivados, apasionados con lo que van a aprender.
El segundo tema: los recursos. Cualquier institución de buena calidad necesita edificios, laboratorios, equipamientos de alta calidad, y eso, por supuesto, tiene un costo.
Y el tercer punto es la gobernanza. Es decir, el liderazgo de la institución, la flexibilidad para responder rápidamente a cambios en el entorno y la medida en la cual vive una cultura de la excelencia que se comparte por todos los actores dentro de la institución.
¿Habla usted de tener, como en un equipo de fútbol, condiciones ideales para liderar una institución?
El ejemplo del equipo de fútbol tiene que ver con la gobernanza. Es decir, hay que ofrecer condiciones de remuneración adecuadas para poder atraer buenos jugadores, buenos instructores en el caso de instituciones como el SENA. Y también darle a cada centro la autonomía de gestión que permita vincularse con el entorno, adaptar sus programas y cambiar rápidamente, no tener que pedir permiso de manera burocrática y demorarse, perder tiempo en eso, sino tener la capacidad de adaptarse a los cambios tecnológicos y laborales en el entorno.
“Hay que pensar en las cualificaciones de los profesores, que tienen que ser muy buenos; en el caso del SENA tienen que tener un buen desarrollo pedagógico y un buen conocimiento del mundo laboral”.
¿Cómo está el SENA hoy encaminado en esa ruta a la excelencia?
Hay que reconocer que el SENA se ha desarrollado de manera espectacular en los últimos años ofreciendo una presencia en todas partes del país, recogiendo a un gran número de jóvenes con necesidad de capacitación y el gran desafío es consolidar y asegurarse que se ofrecen programas de buena calidad y muy pertinentes. Un esfuerzo de autoevaluación va a ser necesario para consolidar los aspectos que lo necesitan.
¿Cómo está el SENA en esos tres aspectos que nos mencionó como esenciales en una institución de calidad?
Yo diría que en cuanto a los recursos el SENA tiene la suerte de tener una fórmula de financiamiento con participación de las empresas que asegura un buen nivel de financiamiento. El tema de los talentos, con el crecimiento rápido hay que preguntarse si todos los instructores tienen la calificación necesaria y también están al día en su conocimiento de la evolución de los puestos en el mundo laboral.
En cuanto al tema de la gobernanza, el SENA, siendo una organización gubernamental, siempre se encuentra el desafío, y tiene la flexibilidad suficiente y la independencia, para que no influyan factores políticos en su gestión.
¿Qué importancia tienen escenarios como el Encuentro Internacional, realizado por la entidad, para la construcción de un SENA en camino a la excelencia?
Es muy importante porque da la oportunidad de hacer un balance de los logros de una institución como el SENA y también escuchar experiencias y tendencias en otras partes del mundo, no para copiar lo que hacen los demás, si no para aprender y ver los principios de las buenas prácticas en diferentes partes del mundo.