Este programa es un acompañamiento del SENA, como prueba piloto, a la iniciativa del INPEC que consiste en concientizar a los jóvenes de las instituciones educativas frente a la comisión de delito y al consumo de sustancias alucinógenas.
“Conocer las historias de vida de los mismos protagonistas, de aquellos que han superado pruebas como el alcoholismo, la drogadicción y la reclusión en una cárcel, fue la estrategia utilizada para sensibilizar a nuestros los aprendices sobre estas malas acciones”, indicó Eddie Yovanny Millán, director del SENA regional Arauca.
El programa se desarrolló en tres momentos: el primero, sensibilización; en el segundo, la visita a la cárcel del municipio capital; y el último, una acción social en beneficio con la comunidad, conjunta entre las personas privadas de su libertad y los aprendices.
Como parte del acercamiento de los aprendices a estas historias de vida, también se realizó una visita a las instalaciones del Centro Penitenciario de Arauca, en la que aprendices llevaron a los internos presentaciones teatrales y musicales; una integración a través actividades lúdicas y entrega de kits de aseo.
“Así como hemos recibido el apoyo del SENA, queremos que a este Programa se sumen todas las instituciones educativas del municipio, puesto que es importante que nuestros jóvenes tengan la verdadera visión sobre la vida de un recluso y sus consecuencias”, indicó el dragoneante Bilianderson Oliveros Hernández, líder del programa “Delinquir no paga” en Arauca.
Adicionalmente, y como cierre de la actividad, se llevó a cabo un trabajo comunitario entre los aprendices y dos personas privadas de su libertad que se encuentran próximas a terminar su condena, trabajando en la restauración del Parque las Corocoras, en la que se realizó mantenimiento a los equipos del parque biosaludable y siembra de árboles.