​Jhon Ever Ruiz Ospina es un manizaleño que desde que prestó su servicio militar, a los 18 años en el Ejército Nacional, se enamoró de la mística y disciplinada vida militar, razón por la cual se hizo soldado profesional. 

“Me gustó el Ejército, lo vi como un opción de trabajo, como el que estudia para ser ingeniero o arquitecto, como una alternativa de desempeñarme laboralmente”, exclamó con poder en sus palabras Ruiz Ospina. 

Actualmente, y después de 20 años de recorrer diferentes zonas de la geografía colombiana con fusil y botas, Jhon Ever está próximo a alcanzar su retiro por cumplir su tiempo de servicio, situación que lo llevó a integrar el grupo de 35 soldados profesionales que se preparan en el SENA pensando en una vida laboral sin camuflado. 

“El SENA es pieza fundamental del Programa Especial de Preparación para el Retiro Asistido, que consiste en brindarle formación integral a los uniformados con el fin de proporcionarles alternativas y herramientas para ser productivos en la vida civil”, explicó Jesús Alfredo Chaparro, director (e) del SENA Caldas. 

Al igual que el soldado profesional John Ever Ruiz, sus compañeros llegaron a los ambientes de formación del Centro de Procesos Industriales y Construcción, con las expectativas de aprender lo necesario para convertirse en auxiliares trabajadores de la madera. 

“Fueron 20 años de conocimientos en armas y guerra, pero ya con este convenio nos están dando una herramienta para nosotros seguir siendo útiles para la sociedad y para nuestras familias”, añadió Jhon Ever, quien hoy tiene 37 años de edad. 

El Auxiliar Trabajador de la Madera es una formación titulada, en la que los aprendices de camuflado deben cursar tres meses de etapa lectiva y tres de práctica, tiempo en el que asimilan las competencias laborales para mecanizar industrialmente piezas de madera y láminas de aglomerado, aplicando normas de seguridad industrial. 

“Estos aprendices ven todos los conceptos básicos, pero principalmente el de la maquinaria convencional y la maquinaria industrial”, explicó Camilo Arango, instructor en el área de madera del Centro de Procesos Industrias y Construcción. 

El teniente coronel Gerardo Avilán Villalba, comandante del Batallón de Infantería número 22 Batalla de Ayacucho de Manizales, explicó qué los convenios interinstitucionales están enmarcados en el Plan Bicentenario ordenado por el comandante del Ejército Nacional. 

“Este convenio le abre otras puertas a nuestros hombres que ofrendaron 20 años de su vida al servicio de la patria, oportunidades que se dan a través de la capacitación que les brinda una entidad con tanta experiencia y nivel educativo como el SENA”, acotó Avilán Villalba. 

Además del grupo de militares que se forma en las instalaciones del SENA en Manizales, 25 uniformados más adelantan en Riosucio, occidente de Caldas, una carrera técnica en instalaciones eléctricas residenciales.