En una época en que la industria conquistaba nuevos mercados y necesitaba más trabajadores y mejor calificados, métodos modernos y cambios drásticos en la productividad, nació una Entidad que fue un espacio de participación para trabajadores, empleadores y Gobierno, y que se llamó Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA).
Su fundador, Rodolfo Martínez Tono era un verdadero convencido de que sin la capacitación del talento humano no habría desarrollo y es así como el SENA, manteniendo coherencia con ese reto, cada día durante 57 años, ha buscado un mejoramiento permanente de tal forma que se ha posicionado como la Entidad más querida por los colombianos.
Una Entidad en la que se ha buscado a través de impartir formación profesional integral, hacer del talento humano la mayor garantía de progreso y bienestar para un país y unas regiones en las que el conocimiento constituye la mayor ventaja competitiva y en las que, sin importar tiempos y distancias, se busca dar respuesta a las necesidades particulares de acuerdo con cada contexto y realidad que se vive, y la que buscan mejorar todos los integrantes de una Comunidad educativa que integra las 33 regionales del SENA en el país.
¿Por dónde empezamos?, preguntó Rodolfo Martínez Tono a los miembros de la Junta Directiva del SENA, en su calidad de primer Director de la recién creada institución (1957).
Con manos unidas y trabajo conjunto, la formación SENA ha evolucionado con la historia del país, tal es el caso de los ambientes de formación, cuyo futuro lo definen dos palabras claves: anticipación e integralidad.
En el pasado, la Entidad realizó un esfuerzo significativo en la modernización de ambientes, entendiendo por esta, el fortalecimiento de las tecnologías medulares de los centros de formación en las diferentes regionales que cubren el territorio nacional haciendo énfasis en las tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC) como medio a privilegiarse en el proceso enseñanza aprendizaje. Luego, la modernización se amplió a otros sectores como: agropecuario, electrónica, automatización, mecánica, salud, biotecnología, infraestructura, entre otros.
Tal como indica Francisco Bedoya, coordinador del Grupo de Gestión Estratégica de la Formación Profesional, de la Dirección de Formación Profesional Integral, las necesidades de estos sectores se solucionaron a través de proyectos presentados por las Redes de Conocimiento concebidas como instancias para gestionar el conocimiento, asegurando la calidad y pertinencia de la Formación Profesional Integral.
“En este orden de ideas, lo que viene para los ambientes de formación del SENA es, en primera instancia, la anticipación basada en la identificación temprana de necesidades de formación mediante la aplicación de técnicas de prospectiva tecnológica que permiten inferir impactos ocupacionales de manera anticipada”, dijo Bedoya.
De esta manera, se pasará de ‘modernizar’ a ‘anticipar’ como una de las respuestas en pertinencia y calidad de la formación.
De otra parte, la integralidad define una solución completa y armónica que, además de aprovechar el canal de las Redes de Conocimiento para concentrar las necesidades, las usa como medio para desarrollar proyectos integrales que aseguren soluciones definitivas y de calidad en términos físicos, tecnológicos, humanos y de conocimiento.
UNA FORMACIÓN QUE ACORTA DISTANCIAS
La formación a distancia surgió en el SENA en 1976 como una alternativa para ampliar la cobertura de los programas de formación ofrecidos. En este mismo año en la Regional Bogotá, se creó el programa de Formación Profesional a través de los Medios Masivos de Comunicación, que tiempo después cambió su denominación por Centro de Formación a Distancia (CEFAD), fue allí, donde se diseñaron los primeros cursos.
En 1982, se da formación a distancia como política de Estado, razón por la que el SENA creó la División Formación a Distancia, con presencia en 18 regionales.
Según Clara Rocío Henao, del Grupo de Gestión Operativa Integral de la Formación en Modalidad Virtual y a Distancia, de la Dirección de Formación Profesional, alrededor del desarrollo de esta modalidad, el SENA realizó grandes avances metodológicos y didácticos.
“La modalidad de formación a distancia alcanzó reconocimientos internacionales. El SENA fue líder a nivel latinoamericano en este campo, ayudó a crear sistema similares en seis países de Centroamérica entre 1990 y 1991 e impartió formación metodológica a los docentes de estos países”, indicó Clara Rocío.
Entre 1991 y 1994 se vio disminuida la oferta de programas a distancia, pero recibió un nuevo impulso en 1995. En esta nueva etapa la modalidad tomó el nombre de Formación Desescolarizada. No obstante, con el auge de internet y las demás TIC, la formación a distancia o desescolarizada comenzó a ofrecerse a través de los ambientes virtuales de aprendizaje (AVA).
En el pasado, la Entidad realizó un esfuerzo significativo en la modernización de ambientes, entendiendo por esta, el fortalecimiento de las tecnologías medulares.
En 2000, el SENA inició su incursión en la formación virtual. Desde 2001 el Centro de Gestión de Mercados, Logística y Tecnologías de la Información, de la Regional Distrito Capital, inició un proceso de formación virtual con cursos complementarios. Posteriormente en el 2003 se inició una formación titulada virtual, mediante oferta cerrada y abierta.
Ese mismo año, se implementó la formación virtual en todos los centros de formación para los cursos cortos, con ventajas como la alta cobertura, la distribución territorial equilibrada y la posibilidad de acortar distancias, además de la atención flexible y oportuna del e-learning empresarial.
En la actualidad el SENA tiene una oferta de más de 274 cursos de formación complementaria en modalidad virtual y se está en el proceso de obtención de registro calificado de nueve programas de formación titulada.
FORMACIÓN PARA LA COMPETITIVIDAD
¿Por dónde empezamos?, fue la pregunta que Rodolfo Martínez Tono les planteó a los miembros de la Junta Directiva del SENA, en su calidad de primer Director de la recién creada institución (1957). Para dar respuesta a esta pregunta, en 1958, el SENA realizó una investigación sobre las necesidades formación profesional en Colombia, que se ubicaron en dos grandes bloques: el de la preparación de la nueva mano de obra y el de la formación complementaria (suministrar elementos de tipo técnico y tecnológico) dirigida al personal vinculado.
Así describió Clara Rocío, el inicio de una mirada pedagógica de la Entidad. Explica además que, para llevar a cabo esta formación se utilizó el método llamado ‘Activo, directo y global’, que permitía suministrar a los trabajadores, en corto tiempo, los conocimientos y la práctica necesarios para realizar una labor completa.
Desde entonces la Entidad implementó diversas metodologías, tal es el caso que en 1995 inició la implementación del modelo de Competencias Laborales. Hasta la fecha, la Entidad está desarrollando estrategias para definir con trabajadores, empresarios, instituciones de formación y entidades del Gobierno las competencias laborales requeridas por el mundo del trabajo. Reunidas en las Mesas Sectoriales, estas instancias, deciden los estándares de desempeño que debe tener un trabajador para considerarse competente.
Clara Rocío recordó que en 1997, se adoptó el Estatuto de la Formación Profesional Integral (FPI) del SENA, para dar directriz sobre los procesos de formación que imparte la Entidad. En 2012, se publicó el ‘Modelo pedagógico de la formación profesional integral del SENA’.
En 1982, se da formación a distancia como política de Estado, razón por la que el SENA creó la División Formación a Distancia, con presencia en 18 regionales.
UNA RED PARA LA PROMOCIÓN DEL TALENTO
En 2006 nació el programa Tecnoparque, una red para la promoción del talento, con compromiso hacia el desarrollo tecnológico, la innovación y el emprendimiento en Colombia, que pone a disposición de todos los aprendices, estudiantes, empresarios y público en general, asesoría especializada, infraestructura física y tecnológica, una red de expertos y contactos, para el desarrollo de proyectos productivos en diferentes líneas y áreas tecnológicas como: tecnologías virtuales, electrónica y telecomunicaciones, ingeniería de producto y procesos y biotecnología y nanotecnología, que se fortalecen y articulan con el sector productivo.
“En su trayectoria hemos participado en grandes eventos a nivel nacional e internacional, trascendiendo barreras hacia mercados y tecnologías internacionales donde se han dado a conocer proyectos y resultados de la Red”, comentó Helena García Romero, gestora nacional de Investigación Aplicada, Desarrollo Tecnológico e Innovación, del Sistema de Investigación, Desarrollo Tecnológico e Innovación (SENNOVA).
Según García, actualmente se realiza un relanzamiento de la Red Tecnoparque en donde tres nodos se convertirán en centros de innovación tecnológica, prestando así tres nuevos servicios para los ciudadanos colombianos: Salas de co-working, en donde empresarios y talentos tendrán la posibilidad de trabajar en conjunto en el desarrollo de nuevas ideas y proyectos de base tecnológica; Laboratorios de diseño estratégico D-Lab, en donde se busca fortalecer el componente de diseño como una habilidad transversal, disponible para todo tipo de proyectos creando de impacto e impulsando el emprendimiento con el diseño, y los Espacios de ideación y unidades de emprendimiento empresarial de base tecnológica.
“Actualmente la Red Tecnoparque cuenta con 15 nodos a nivel nacional, en 11 regionales del país y con un equipo humano de más de 170 personas que acompañan el desarrollo de proyectos productivos de base tecnológica para materializarlos en prototipos, aportar a la innovación del país y promover el talento innovador colombiano”, agregó la funcionaria.
POR UNA CIENCIA AL ALCANCE DE TODOS
Con el objetivo de acercar a los jóvenes a la ciencia y ocupar su tiempo y atención de manera constructiva y productiva, en 2008 nació Tecnoacademia, un centro de enriquecimiento científico para estudiantes de 8º y 9º grado.
En diciembre de 2009 se inauguró la Tecnoacademia Cazucá siguiendo el modelo de Bergen County Academy, institución que ofrece formación secundaria técnica y que ha sido calificada como la mejor institución de educación secundaria de los Estados Unidos. Posteriormente, se inauguró la Tecnoacademia Medellín y después la Tecnoacademia Neiva.
Se puede afirmar que desde sus inicios ha sido evidente el potencial de Tecnoacademia para generar conocimiento y vocaciones en ciencia y tecnología, así como el impacto que tiene en reducir violencia juvenil, deserción escolar y otras conductas de riesgo entre los jóvenes.
Con el objetivo de acercar a los jóvenes a la ciencia y ocupar su tiempo y atención de manera constructiva y productiva, en 2008 nació Tecnoacademia.
“Tecnoacademia al funcionar en contrajornada escolar complementa la educación que reciben los jóvenes en el colegio y les permite profundizar en temas de ciencias que les interesan, acercándose al conocimiento de una manera distinta”, explicó Helena.
Desde 2010 se han formado más de 10.mil jóvenes en nanotecnología, biotecnología, ingeniería y robótica, ciencias básicas y tecnologías virtuales. En 2014, un grupo de 25 jóvenes de la Tecnoacademia Cazucá, denominado ‘Space Stars’, participó en el torneo regional de robótica robusta en California (Estados Unidos), al igual que 12 estudiantes de robótica Vex que compitieron en el mundial de este tipo de robótica. Estas experiencias han hecho crecer a Tecnoacademia y abren las puertas a mayores oportunidades a los jóvenes.
“La Tecnocademia, como la misma ciencia, viene creciendo y consolidándose en un cuidadoso proceso de ensayo y error que ha dado muchos frutos y dará muchos más con la expansión que está planeada para este año, en el que Tecnoacademia estará presente en seis ciudades más: Bucaramanga, Ibagué, Cali, Manizales, Túquerres y Pereira”, concluyó Helena.
Tecnoacademia es el semillero de vocaciones técnicas y científicas del SENA y del país. Genera igualdad de oportunidades a través del desarrollo de talentos en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.