En busca de mejores condiciones de vida y asumiendo el riesgo de aventurar en una tierra desconocida, Ruth Muñoz Barrera y su familia llegaron en 2010 a esta ciudad del sur del país, en donde con el apoyo del SENA hoy hacen realidad su sueño empresarial y además ofrecen una oportunidad laboral a seis habitantes de la región.
Para esta mujer de 36 años, sus hijos Anderson y Laura, y su esposo, no fue fácil dejar la capital colombiana e iniciar una nueva vida. El hombre de la casa se empleó realizando estructuras en el Centro Penitenciario Las Heliconias y ella formó una pequeña heladería en la sala de su casa del Barrio La Libertad.
A la par con la labor comercial, se formó como tecnóloga en Gestión Administrativa en el SENA, entidad que sin ella imaginarse a través de Fondo Emprender le abriría las puertas para tener su propio negocio y crear Andamios Modulares Certificados, a lo que hoy en compañía de su familia dedica todos sus esfuerzos.
“Iniciamos nuestra nueva vida y encontré la oportunidad de ser cada día mejor; recibí formación integral y el sueño de hacer empresa hoy nos hace muy felices”, expresó Ruth quien es su época de aprendiz y con el acompañamiento de los gestores de Emprendimiento fortaleció su idea de negocio.
El componente innovador del proyecto, que consistía en fabricar y comercializar andamios con una pieza especial en línea que le diera mayor seguridad a la herramienta, lo que se traduce en el beneficio colectivo de mayores garantías de protección en la construcción, permitieron la viabilizacion por parte del Fondo Emprender que le entregó 103 millones de pesos de capital semilla.
“Iniciamos nuestra nueva vida y encontré la oportunidad de ser cada día mejor; recibí formación integral y el sueño de hacer empresa hoy nos hace muy felices”.
Con los recursos asignados, creatividad y esfuerzo, “diseñamos y elaboramos en lámina de acero la roseta ‘Ringlook’, un elemento en línea que le da mayor seguridad al sistema; los andamios los alquilamos y también se venden a las empresas de construcción”, agregó Ruth.
La roseta es diferente a las que se conocen en el mercado, es segura, versátil, resistente, de fácil transporte y rápido montaje y desmontaje; además resulta económica y adaptable a proyectos de diferentes sectores de la industria.
“No conocía el sistema y lo estoy aprendiendo a fabricar, por ser algo nuevo a la empresa le está yendo bien; además hoy en día puedo decir tengo trabajo y mi familia va a estar mejor”, manifestó Anderson Pimentel, uno de los empleados de Andamios Modulares Certificados.
En el establecimiento comercial también se trabaja un sistema alterno para la ubicación de los soportes y así lograr más seguridad en la estructura de tres modelos de andamios (sencillo, estándar e industrial), fabricados de acuerdo a las necesidades del cliente.
“Nuestros procesos de formación son de excelente calidad; la experiencia exitosa de Ruth así lo demuestra y por ello no me cabe la menor duda que la región necesita cada día más de los técnicos y tecnólogos que se forman en la entidad”, afirmó José Delby Vargas Gutiérrez, director del SENA en Caquetá.
Con su empresa en crecimiento, Ruth y su familia ‘echarán raíces’ en Florencia, una tierra que los acogió.