Palines, azadones, machetes, hachas, clavos y serruchos, entre otros materiales para el uso agrícola y la construcción, fueron entregados a 180 familias de la comunidad indígena Jiw, de los resguardos La María y Barrancón, para dar solución a los problemas de vivienda y alimentación que sufre la población de dichos lugares.
"Las herramientas nos sirven para hacer el trabajo de los cultivos. Las podemos utilizar para sembrar yuca, plátano, maíz y todo. Ahora sólo esperamos la semilla y el arado para trabajar", afirmó Arsenio Castillo González, habitante del resguardo Barrancón.
Los instructores del SENA capacitarán a los indígenas en construcción de viviendas, desarrollo agrícola y producción artesanal. "Ellos nos explicarán y guiarán sobre cómo utilizar todas esas herramientas", agregó Castillo.
Instructores del SENA formarán a indígenas en construcción de viviendas, desarrollo agrícola y producción artesanal.
La iniciativa hace parte de la contribución que la Entidad hace al programa de construcción de vivienda gratuita, liderado por el Gobierno Nacional, para el beneficio de las familias más vulnerables del departamento.
También es el resultado de procesos que iniciaron en 2010 con el proyecto liderado por el SENA 'Vivienda saludable', en el resguardo indígena El Refugio, donde el pueblo Tukano Oriental construyó 41 casas y mejoró el entorno –a través del modelo de autoconstrucción– con el apoyo de la entidad más querida por los colombianos.
La iniciativa es el resultado de procesos que iniciaron hace tres años a través de un proyecto liderado por el SENA y en el que el pueblo Tukano Oriental construyó 41 casas y mejoró el entorno.
Según Julio Hernández, gestor social de la Oficina de Empleabilidad del Centro de Desarrollo Agroindustrial, Turístico y Tecnológico, de la Regional Guaviare, "en 2012 se firmó un convenio, con la Alto Comisión de las Naciones Unidos para los Refugiados (ACNUR), para replicar esta acción con la Construcción de 156 viviendas".
El plan de acción para la protección y la conservación de estas comunidades ha permitido que otras entidades –además del SENA– se vinculen al proyecto, y entre las que se encuentran la Alcaldía de San José del Guaviare (Guav.), la Gobernación, el Departamento para la Prosperidad Social (DPS), el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
Estas organizaciones brindarán apoyo en salubridad, elementos de trabajo y aportes para el fortalecimiento e inicio de cultivos para brindar alimentación a las comunidades.