El experto en derechos humanos y especialista en Derecho Administrativo, Camilo Ernesto Fagua Castellanos, afirmó que es un acierto la iniciativa que la entidad en que más confían los colombianos viene desarrollando a través de las nuevas tecnologías en la creación de videojuegos que tienen como elemento innovador un enfoque de paz y de respeto por la vida.
Para este académico, la labor que cumple el SENA es muy importante, no solo por el momento coyuntural que vive la nación, sino por la adaptabilidad a las necesidades de la generación actual que se distingue por el uso de herramientas tecnológicas.
SENA Noticias aprovechó su presencia como invitado al conversatorio ‘Video juegos educativos para la construcción de la paz y los derechos humanos en Colombia’, realizado en Tecnoparque Nodo Cazucá, para preguntarle sobre la importancia de llegar a los jóvenes con una propuesta que, además de entretenimiento, contenga un enfoque constructivo hacia la reconciliación.
Desde su experticia en el tema de los derechos humanos, ¿cuál fue en síntesis su aporte en este conversatorio adelantado en Tecnoparque de Cazucá?
“La academia debe jugar un papel importante por el momento crucial que atraviesa el país, además porque es un programa piloto en el tema de incursionar con nuevas tecnologías con enfoque de paz”.
Me llamó mucho la atención participar en este foro, creo que la academia debe jugar un papel muy importante por el momento crucial que atraviesa el país, además porque podemos decir que es un programa piloto en el tema de incursionar con nuevas tecnologías con enfoque de paz y me pareció que compartir nuestra experiencia en este tema puede ayudar a los jóvenes apropiarse de los conocimientos de los derechos humanos y esto les servirá como un pilar para la construcción de la paz.
¿Qué impacto puede tener en la población juvenil, acostumbrada a juegos violentos y con temáticas diferentes, una propuesta de esta índole?
El uso de estas herramientas es muy importante si queremos lograr transformaciones, en especial llegar a un público objetivo como son los jóvenes; de hecho soy de la generación que creció con los videojuegos y sé por experiencia propia que el impacto puede ser positivo porque no es el videojuego de violencia e irrespeto por la vida, es más bien un generador de conciencia y un conductor hacia una cultura de paz.
¿Conoce experiencias similares a estas que se estén implementando a nivel nacional o en otros países?
Conozco una experiencia de que se desarrolló en España, es un juego basado en el conflicto palestino-israelí y maneja la temática de la construcción del respeto desde la diferencia y la creación de un espacio de convivencia de los dos pueblos; es un claro ejemplo de cómo se puede usar una herramienta como medio de sensibilización, es colocar la tecnología al igual que el conocimiento, al servicio de los seres humanos.
¿Qué factores relevantes destacaría usted del SENA y la creación de juegos para la paz?
A lo que hace el SENA a través de estas propuestas le veo dos grandes aportes: uno de tipo reflexivo, porque va generando un proceso de concientización, y el otro de tipo práctico, porque el aprendiz va generando unos conocimientos que lo llevan a pensar en cómo aplicar lo que sabe para crear un cambio social, por supuesto mediante la creación del video juego mismo.
“El SENA tiene una ganancia con estas propuestas que ha acompañado en el desarrollo de proyectos productivos. Con sus estrategias arrebatan a personas de la pobreza, las drogas y la violencia”.
¿Desde que otros ángulos se puede generar esta conciencia de paz en los jóvenes?
En el ámbito familiar lo empezamos a construir a partir del respeto, del uso de la no violencia, del diálogo, de aborrecer cualquier tipo de agresión sea verbal o física a cualquier miembro de familia y que también cada uno se entere que tiene unos derechos y deberes como actor ciudadano.
El otro campo es el papel de las instituciones educativas; estas tienen la responsabilidad de crear ambientes de reflexión y ser generadoras de cambios sociales a partir del conocimiento. En mi opinión, desde las TIC el SENA hace una labor magnifica por la paz, ha descentralizado la educación; un claro ejemplo es esta sede de Tecnoparque en Cazucá… esto significa que aquí hay un sector de la población que lo necesita y se va a beneficiar de este recurso.
Pensando en los videojuegos, ¿cuál es el reto para vencer la violencia?
Aquí tenemos una apuesta verdadera, un reto que va enfocado al reconocimiento de derechos humanos, al reconocimiento del mismo entorno y de los factores que han incidido en la pobreza y la calidad de vida. Precisamente el SENA tiene una ganancia con estas propuestas que ha acompañado en el desarrollo de proyectos productivos. Con sus estrategias arrebatan a personas de la pobreza, las drogas y la violencia; están ganado la batalla.