¿Sabía que durante la Revolución Industrial se empezaron a desaparecer las polillas claras? Esto se dio por la contaminación de hollín que cubría los árboles y las hacía visibles para sus depredadores. Entre tanto, las polillas oscuras podían camuflarse fácilmente; así se preservaron.
A través del análisis de casos como el de las polillas y del fomento del interés por la investigación científica y tecnológica, más de 1.000 niños y jóvenes, estudiantes de los últimos grados de bachillerato, entre ellos 600 que asisten a las Tecnoacademias del SENA, participaron en la segunda edición de Clubes de Ciencia Colombia.
Divididos en 66 clubes y acompañados por 132 investigadores que realizaron sus estudios de posgrado en universidades de Estados Unidos, diferentes países de Europa y Colombia, los participantes adelantaron durante una semana proyectos de biotecnología, ingeniería, energías renovables y aprovechamientos de residuos, entre otras áreas.
Es el caso del club llamado 'Aprovechemos nuestras basuras', integrado por aprendices de la Tecnoacademia ubicada en la capital antioqueña; ellos, a partir de residuos orgánicos como las cascaras de los cítricos, extraen pectina, una fibra que permite espesar helados, mermeladas y jaleas de forma natural y añadiendo menos azúcar.
"Tecnoacademia nos da bases, nos ilustra y nos permite despertar la curiosidad para ejecutar proyectos útiles para la vida. El de la pectina, por ejemplo, es muy importante en un país agrícola como el nuestro, donde desechamos las cosas sin pensar para qué más nos pueden servir", dijo Elizabeth Arias, estudiante de grado 11.
Antonio Copete, investigador posdoctoral de la Universidad Harvard y uno de los fundadores de Clubes de Ciencia Colombia, expresó: "Creemos que la investigación científica es muy importante para el desarrollo económico y social de Colombia; con los clubes queremos mostrarle al país el potencial que tiene desde el punto de vista intelectual, especialmente en jóvenes que están empezando a formarse".
Copete añadió que "el SENA es una entidad que claramente está ayudando a que los jóvenes descubran y exploten su propio talento; con el trabajo conjunto con los Clubes de Ciencia, lidera una revolución intelectual".
Entre otros clubes, por ejemplo los reunidos en Pereira (Risaralda), integrados también por aprendices de Tecnoacademia se presentaron los proyectos 'Neuroprometeo', a través del cual se busca encender la llama del conocimiento sobre las neurociencias; 'Visión del computador'; 'Aprendiendo a clonar, cultivo de tejidos: de la célula al organismo', entre otros.
"La participación del SENA en Clubes de Ciencia es importante porque nuestros aprendices reciben una orientación de expertos con alto conocimiento científico y tecnológico provenientes de las mejores universidades, además porque contribuimos a que se apropien de una determinada disciplina y desarrollen sus proyectos", explicó Emilio Navia, coordinador nacional del Sistema Nacional de Investigación, Desarrollo Tecnológico e Innovación del SENA (SENNOVA).
Entre sus objetivos, Clubes de Ciencia Colombia busca promover la ciencia y la tecnología como herramientas en la construcción de paz; en la iniciativa, el SENA participa como patrocinador a través de un convenio con Colciencias.
En el encuentro también participaron clubes de diferentes universidades e instituciones educativas del país.